domingo, 24 de enero de 2021

Reflexión uno del capitulo uno de Juan.

Serie de sermones basado en el capítulo uno del Evangelio de Juan.

Tema uno.

El milagro de la visitación.

Acabamos de celebrar la navidad, donde los cristianos, recordamos el nacimiento del Señor Jesucristo, que desde la teología de Juan, es la encarnación de Dios, hecho hombre, convirtiéndose como fundamento para la redención de su pueblo.

La importancia de conocer a Jesucristo, es vital para sus discípulos, ya que es el fundamento sólido de la fe. La madurez espiritual, tiene que tener raíces profundas en la Biblia. Uno de los grandes peligros del cristianismo de hoy, es el desconocimiento de Dios, en la Palabra.

 

Primero la pre existencia de Cristo.

Juan 1:1  En el principio era el Verbo,  y el Verbo era con Dios,  y el Verbo era Dios.2  Este era en el principio con Dios.3  Todas las cosas por él fueron hechas,  y sin él nada de lo que ha sido hecho,  fue hecho.4  En él estaba la vida,  y la vida era la luz de los hombres.

 

Jesucristo conjuntamente con el Padre. Juan, presenta la existencia de Jesucristo, antes de la manifestación de su nacimiento. El señor Jesús es Dios eterno, y cuando leemos el Antiguo Testamento, debemos ver a Jesucristo juntamente con el Padre, actuando en la historia de la salvación de su pueblo. 

 

Claramente el evangelio de Juan afirma:

 

Juan 1:1  En el principio era el Verbo,  y el Verbo era con Dios,  y el Verbo era Dios. 2  Este era en el principio con Dios.

 

Existe un paralelo entre Juan 1:1 Y Génesis 1.1, en Génesis este principio comienza con el soplo de la creación, pero en Juan, se inicia el proceso de la nueva creación, que es el pueblo redimido por la gracia del Señor.

 

Ahora bien, Juan llama a Jesucristo el verbo, la promesa de toda las Escrituras. Jesucristo, es Dios, estaba antes revelarse a los hombres con el Padre. Así Juan ve el principio con Dios, lo que en el génesis no explica Juan lo revela.

 

El Sentido práctico, de estos dos versículos para la vida del Cristiano, consiste en que; nosotros podemos ver en Jesucristo, nuestro salvador, a la vez, siendo Dios eterno, podemos estar seguros, que su favor y misericordia se evidencia en que vino a buscarnos y redimirnos por su gracia.

 

Las personas que no conocen a Dios, buscan intercesores, o mediadores, para lograr el favor de su dios,  pero nosotros, que conocemos la verdad del evangelio, sabemos que Jesucristo es el hijo de Dios y verdadero Dios, y por lo tanto; podemos acercarnos confiadamente a Él.

 

(Hebreos 4:16)


Acerquémonos, pues, confiadamente al trono de la gracia, para alcanzar misericordia y hallar gracia para el oportuno socorro.

 

 Por lo tanto; como lo relata el evangelio de Juan, el vino a buscarnos, y nos ha encontrado.

 

Entonces podemos decir que Jesucristo es la Palabra encarnada y en ÉL, estamos completos y podemos reconocer que el Señor es lo único que tenemos seguro en esta vida, lo demás es temporal y efímero.

 

Jesucristo creador de todo.

 

Todas las cosas que vemos, fueron creadas por el Señor Jesucristo, así lo  explica el versículo tres.

 

(Ver 3).

 

3  Todas las cosas por él fueron hechas,  y sin él nada de lo que ha sido hecho,  fue hecho.

 

Este pasaje es explícito, todo lo que está a su lado, toda la creación, lo visible e invisible fue creado por Él (JESUCRISTO)  y el énfasis es claro y sin ÉL, nada existiría. Eso nos incluye a usted y a mí, existimos porque el Señor Jesucristo nos creó y permitió que naciéramos espiritualmente para su gloria.

 

Como lo enseña el versículo cuatro:

 

 En él estaba la vida,  y la vida era la luz de los hombres.

 

Solo en Jesús tenemos la vida y solo ÉL puede dar vida a lo que está muerto, ya que puede crear y hacer nuevas criaturas.  En ese sentido, quiero darle una buena nueva, todos los que hemos nacido de nuevo, es porque el Señor nos creó y dio vida.

 

Como dice el salmo 79:13

 

13  Y nosotros,  pueblo tuyo,  y ovejas de tu prado,

Te alabaremos para siempre;

De generación en generación cantaremos tus alabanzas.

 

Segundo La lucha contra las tinieblas.

 

 

5  La luz en las tinieblas resplandece,  y las tinieblas no prevalecieron contra ella.6  Hubo un hombre enviado de Dios,  el cual se llamaba Juan.7  Este vino por testimonio,  para que diese testimonio de la luz,  a fin de que todos creyesen por él.8  No era él la luz,  sino para que diese testimonio de la luz.9  Aquella luz verdadera,  que alumbra a todo hombre,  venía a este mundo.

 

(Ver 5) Claramente este pasaje menciona la lucha espiritual que todos los que creemos en Cristo, tenemos que enfrentar.  Es una constante batalla contra nuestra naturaleza caída. Pero que no podemos desconocer, que está directamente influenciada por las corrientes espirituales de las tinieblas.

 

La lucha tiene ya una sentencia anunciada, las tinieblas, no, podrán prevalecer contra la luz de Cristo.  Satanás, los demonios y todas las fuerzas oscuras, no tienen poder alguno, sin el permiso de nuestro Dios.

 

(Ver 6-8) Dios en su infinita misericordia, utiliza tizones arrebatados del fuego, para que prediquen su Palabra y anuncien la victoria del Señor Jesucristo, ese es el llamado a la iglesia del Señor y nosotros estamos puestos, para ser anunciadores de los propósitos de Dios para las naciones.

 

(Ver 9) El mensaje es claro, igual que Juan el Bautista, predicaba que venía la luz a los hombres por primera vez, nosotros anunciamos que El queda vida, viene por segunda vez.

 

TERCERO JESUCRISTO SE REVELA A LOS HOMBRES QUE EL HA DETERMINADO LLAMAR.

 

10  En el mundo estaba,  y el mundo por él fue hecho;  pero el mundo no le conoció.11  A lo suyo vino,  y los suyos no le recibieron.12 Mas a todos los que le recibieron,  a los que creen en su nombre,  les dio potestad de ser hechos hijos de Dios;13  los cuales no son engendrados de sangre,  ni de voluntad de carne,  ni de voluntad de varón,  sino de Dios.

 

(Ver 10-11) Vivimos en una sociedad donde el conocimiento de Dios, es algo que está mediado por la religión, muchas personas confunden al Señor con un credo religioso, pero no conocen al Señor de las Escrituras. Los versículos que acabamos de leer, dice que el Señor está en el mundo, el cual fue credo por Él, pero las personas no lo conocieron.

 

¿Cuál es la razón que las personas no conocen al creador y dueño de todas las cosas?

 

La respuesta desde nuestra confesión de fe, es que Solo los que por la gracia del Señor, han recibido la luz del evangelio, podrán reconocer al Señor de gloria.  El Señor siempre está  llamando  a la puerta del corazón, pero solo los que en la gracia son tocados para vida eterna, responderán al llamado divino.

 

Que hermoso hermanos, saber que usted y yo, fuimos escogidos por la gracia santificante de nuestro Padre celestial y hoy fruto de su amor incondicional, somos parte de su pueblo. Gloria a Dios.

 

 

(Ver 12-13).  Prestemos la atención al versículo 13, no somos engendrados, por voluntad humana, quiere decir que usted y yo, estamos vivos y vivimos para el Señor, porque Él es quien ha construido nuestra historia de salvación.  Es Dios, quien nos amó con ese amor eterno, por el cual, vivimos y alabamos su santo nombre.

 

 

Cuarto Jesucristo vive entre nosotros y es la revelación del Dios invisible.

 

14  Y aquel Verbo fue hecho carne,  y habitó entre nosotros  (y vimos su gloria,  gloria como del unigénito del Padre),  lleno de gracia y de verdad.15  Juan dio testimonio de él,  y clamó diciendo:  Este es de quien yo decía:  El que viene después de mí,  es antes de mí;  porque era primero que yo.16  Porque de su plenitud tomamos todos,  y gracia sobre gracia.

 

 

(Ver 14) Nos presenta dos aspectos relevantes de la visitación del Señor. Primero: Jesucristo, quien es Dios, fue hecho como nosotros, en ello vemos como nuestro salvador, conoce la condición nuestra y por lo tanto; puede salvarnos de las luchas que mantenemos. Segundo: Nosotros por la gracia del Padre, vemos la gloria de nuestro Dios, la cual es el resultado de su gracia y verdad.

 

Si hay algo, que podemos estar seguros, es que en este nuevo año que está transcurriendo sus primeros días, hemos visto y veremos la gracia y favor del Señor, que es su misma gloria.

 

(Ver 16) En el Señor, tenemos una fuente inagotable de su gracia, el pasaje nos enseña a ver, como de Él tomamos gracia, sobre gracia. Eso quiere decir, que lo que ha pasado con nuestra vida y lo que hoy estamos viviendo y lo que viviremos, es fruto de ese amor inmerecido, pero que el Señor le plació depositar en vasos de barro.

 

El apóstol Pablo afirmo en 1ª Corintios 15:10.

 

1Co 15:10  Pero por la gracia de Dios soy lo que soy;  y su gracia no ha sido en vano para conmigo,  antes he trabajado más que todos ellos;  pero no yo,  sino la gracia de Dios conmigo.

 

Ante la incapacidad nuestra de obediencia la fidelidad de Jesucristo, nos da justificación ante el Padre.

 

17  Pues la ley por medio de Moisés fue dada,  pero la gracia y la verdad vinieron por medio de Jesucristo

 

La ley de Moisés: nos mostró nuestra incapacidad para agradar al Padre, todos los hombres y mujeres que nos relata las páginas del Antiguo Testamento, sucumbieron ante las exigencias de la ley del Señor, pero Jesucristo, vivió y cumplió, todas las demandas y ahora, nosotros por creer en él, somos salvos por su gracia.

 

Conclusión:

 

Nosotros, conocemos a Dios, por la obra de Jesucristo y en Él y por Él, somos salvos.

 

18  A Dios nadie le vio jamás;  el unigénito Hijo,  que está en el seno del Padre,  él le ha dado a conocer.

 

 

 

 

 


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